Nada es para siempre, ni lo bueno ni lo malo. Posiblemente pases por momentos en los que creas que tu vida va a acabar ahi pero no, siempre sigue. Porque cuando estamos mal pensamos que nada tiene sentido, pero tiene mucho ya que después de lo malo siempre hay algo bueno esperándonos, aunque a veces parece que no está, sí está, encondido tal vez. Muchas veces verás como entras en una habitación en la que se cierran las puertas y todas las paredes van acercandose, el espacio se va reduciendo lentamente y puede que hasta en un momento sientas las cuatro paredes rozandote la piel pero será lo único que haga, rozarte. Cuando creas que tu vida llega a su final se abrirá una ventana que te llevará a una de tus mejores etapas, incluso puede que te lleve al cuento de hadas con el que siempre soñaste.